Vias de Conducción



Vías de Conducción 


Vías de conducción nerviosa:


Dentro del sistema nervioso central los impulsos pueden seguir distintos caminos: ascendentes o descendentes.

Los ascendentes:  Se originan en los receptores periféricos, penetran en los órganos del sistema nervioso central, médula, bulbo, protuberancia, etc. Y ascienden hacia órganos superiores: son las vías sensitivas.


Las descendentes: Su origen en estructuras altas, cerebro, cerebelo, pedúnculo, bulbo y descienden hacia la médula: son las vías motoras.


Además de estas vías, hay una tercera clase de fibras nerviosas que tienen por misión unir y vincular entre sí distintos órganos nerviosos: son las vías de asociación o endógenas, porque nacen y terminan dentro de órganos centrales, sin conexión directa con los nervios periféricos. También pueden ser ascendentes o descendentes.



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Vías ascendentes o sensitivas:


Son las conductoras de la sensibilidad. “Sensibilidad es la facultad de sentir o percibir las impresiones transmitidas internas o externas”.

En el  humano hay dos clases de sensibilidad, de acuerdo al origen de los estímulos: la sensibilidad externa o exteroceptiva y la interna o interoceptiva, que a su vez puede ser propioceptiva (receptores dentro del cuerpo: articulaciones, músculos, vestibular.) y visceroceptiva (receptores en vísceras).

Exteroceptiva: por ejemplo, piel, puede captar cambios en temperatura, presión, tacto, los órganos de los sentidos, los olores, colores, gusto, luz, sonido.

Visceroceptivas: en estado normal, las vísceras “no se sienten”, sí cuando hay algún trastorno, que se puede traducir en dolor.



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Vías motoras

Las vías motoras conducen  la respuesta elaborada en los centros motores hasta los efectores. Son las encargadas de llevar a los músculos esqueléticos los impulsos que parten de los centros superiores motores.

Los axones de estas neuronas motoras de orden superior descienden para hacer sinapsis con interneuronas, neuronas motoras alfa o ambas en la sustancia gris de la médula espinal. 
Las vías descendentes son esenciales para el control de los movimientos voluntarios y además constituyen el nexo entre los pensamientos y las acciones.
Los sistemas descendentes que se originan en el tronco encefálico son responsables de integrar la información sensitiva vestibular, somatosensorial y visual para ajustar la actividad refleja de la médula espinal

El área 4 de Brodmann es la corteza primaria

El área 6 de Brodmann es la corteza premotora y la corteza motora suplementaria son esenciales para planificar, iniciar y dirigir los movimientos voluntarios.

Origen: Son los axones de la corteza  cerebral, específicamente el área 4.  Esta zona posee un mapa de todos los músculos del cuerpo, más extensa es el área cuanto más precisos son los movimientos a ejecutar.




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Vías de la sensibilidad interoceptiva


Sensibilidad propioceptiva: Se llama así porque los estímulos que la provocan están en nuestro propio cuerpo, son nuestros movimientos articulares, contracciones musculares, tensiones tendinosas, cambios de postura de los miembros, tronco o cabeza, etc. Estos movimientos pueden ser activos o pasivos.

Los receptores de estas vías están en tendones, articulaciones, o en los músculos (husos, Órganos tendinosos de Golgi).

Otros receptores son los corpúsculos de Paccini, especializados para la presión profunda, muy cercanos a zonas óseas. Otros receptores especializados son las células ciliadas de los conductos semicirculares del vestíbulo (oído interno), estimulado por los movimientos del fluido endolinfático que acompaña a todos los cambios de posición de la cabeza.
Según su lugar de terminación, las vías de la sensibilidad propioceptiva se pueden dividir en dos grandes grupos:

1.- la propioceptiva consciente, que termina en la corteza cerebral

2.- la propioceptiva inconsciente, que finaliza en el cerebelo o en el tálamo.
La sensibilidad propioceptiva vestibular tiene vía propia, es el nervio vestibular III par que termina en el bulbo y cerebelo.


















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Vía de la sensibilidad propioceptiva conciente:

  1. Neurona: ganglio espinal. Sus dendritas salen por el nervio raquídeo y llegan a los receptores situados en las unidades locomotrices, en cambio, su axón entra en médula por la raíz posterior, en su sector interno. Son fibras muy gruesas y muy bien mielinizadas que penetran en el cordón posterior, se hacen ascendentes, recorren la médula, penetran en bulbo, y terminan haciendo sinapsis con las células del núcleo de Goll y Burdach. Esta neurona se llama ganglionar. (Los fascículos de Goll y Burdach no son dos fascículos diferentes, son dos ubicaciones dentro del cordón posterior de las mismas clases de fibras.
  2. Los axones: De las células de los núcleos de Goll y Burdach se cruzan en la parte más alta de médula,  forman la cinta de Reil (lemnisco medial) el cual cambia de dirección, se hace ascendente, recorre bulbo, protuberancia, pedúnculo cerebral y finaliza haciendo sinapsis con las células del núcleo ventral-posterior del tálamo.
  3. Neurona: Son los axones de las células del núcleo ventral-posterior del tálamo y terminan haciendo sinapsis con las células de la corteza cerebral.



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